Podemos
definir a la imagen como nuestra carta de recomendación o como el dicho dice
“como te ven te tratan”, con estas definiciones estamos dejando en claro que la
imagen es algo externo, visual e incluso hasta superficial, la primera
impresión nunca se olvida y es verdad pues con un poco de rato que se halla
interactuado con alguien inmediatamente se forman una opinión de nosotros sea
cierta o no.
En pocas
palabras la opinión que tiene la gente de uno en si es nuestra imagen pública
la que nos puede ayudar a sobresalir o a dejarnos estancados, la imagen no sólo
es cuestión de moda y apariencia sino que también toma en cuenta nuestras
acciones, reacciones, nuestra forma de hablar, en fin toda la congruencia de
nuestros actos.
Ahora si
podemos decir que la imagen es una percepción que los demás tienen sobre uno a
partir de la apariencia, vestimenta, actitud y comportamiento, donde cada uno
de estos puntos tiene la importancia que merecen.
Para
construir una buena imagen debemos aprender que el secreto está en la
congruencia entre lo que somos y queremos proyectar, es decir, la imagen es un
reflejo absoluto de quienes somos así que debemos hacer que nuestra imagen
pública trabaje a favor de nosotros y no en contra; puesto que nuestra imagen
deben reflejar ante los demás nuestra autoestima, la confianza, la seguridad,
la credibilidad, la confianza, entre otros elementos.
La imagen
habla de nosotros todo el tiempo usa la comunicación no verbal para transmitir
el mensaje acerca de nosotros, de igual manera la imagen es capaz de hacernos
adquirir un valor inimaginable al convertirse a lo largo del tiempo en nuestra
reputación ya sea buena o mala.
Para
diseñar o construir una imagen que nos ayude a abrir las puertas de nuevas y
mejores oportunidades, se necesita de mucho más que solo saber vestir o que
esta a la moda; es menester que seas consciente de la imagen que deseas
comunicar y averigües qué imagen es la que proyectamos actualmente, para así
poder mejorar la actitud, el lenguaje corporal, la manera en que hablamos y nos
desenvolvemos profesionalmente, elegir la apariencia y vestimenta que, sin
palabras, nos ayudarán a alcanzar nuestros objetivos.
Siboney Espinoza Mata
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